27-09- 2016.
*Algo de nosotros muere con la muerte de Gonzalo Márquez Cristo (que tuvo lugar el día 24 de mayo del presente). Algo puro estremece el silencio del cielo y se desgarra en nubes blanquísimas y derrama las lágrimas del paraíso. El bosque lamenta la iluminada soledad de las raíces y pregunta por el corazón de Gonzalo lleno de augurios y pájaros. El bosque sacude la sombra errante del viento. El canto de las hojas se sumerge en las aguas de nuestro llanto, en la mudanza efímera de nuestro cuerpo. Hasta pronto, Gonzalo. Tu abecedario encantado es eterno.
PARA TI GONZALO
Aquí estoy bajo los frutos dorados de tu errancia.
Bajo la luz de tu alfabeto de tierra navegada.
Bajo la pureza intocada de tus sílabas.
En el corazón visionario de tus preguntas
¿Quién dijo que morir es viajar?
Aquí estoy al pie de tu silencio
Peregrino iluminado
Al pie de la mudez desgarrada de las nubes
Al pie del llanto de las hojas
Al pie de tus ojos de niño sabio cazador de augurios
Ardiente lector de crepúsculos de agua y auroras de piedra
Al pie de la resurrección de tu alma
Y el Apocalipsis de la rosa
Aquí hermano más solo que mi propia sombra
Viendo al árbol sediento de luz que se sumerge en mis lágrimas
Y no hay sombra, Gonzalo
Algo de mí viaja en el tren de tu partida.
En el reino innombrable donde duermen
los milagros invisibles y eternos
La rosa se deshoja.